Paren el tren! Tarifas prohibitivas

02.10.2012 — Informes analliticos

Los responsables de "Ferrocarriles de Rusia" S.A. han propuesto un cambio en el proceso tecnológico de transporte de mercancías. Dichas propuestas hacen referencia tanto a la organización del tráfico como a la gestión de los operadores privados. Los expertos creen que las innovaciones únicamente traerán problemas adicionales a los expedidores de mercancías. Tal como aclara el corresponsal de "RusBusinessNews", el monopolio ferroviario está tratando de resolver sus problemas a costa de los consumidores. A esto contribuye su estado actual: al disponer de un importante parque de vagones, Ferrocarriles de Rusia puede, al mismo tiempo, conservar el derecho de regulación del mercado del transporte.

La reforma del sector ferroviario ruso, que comenzó hace siete años, evidentemente, no funciona bien. Los intentos de introducir elementos de competencia en el sector monopolizado se han convertido primeramente en un caos total, luego en la falta de vagones y en el alza del precio de los servicios. Para llegar a esta situación han aportado su grano de arena no sólo los operadores privados que se negaron a transportar cargas de poco beneficio, sino "Ferrocarriles de Rusia", S.A. que por alguna razón no ha sido capaz de poner en funcionamiento toda la flota de vagones y organizar las entregas.

Un mediocre trabajo del monopolista llevó a que el precio del transporte en 2010-2011 comenzara a crecer como la espuma. Según el director comercial de "Zapaduralnerud" S.L. Vladimir Zharinov, los precios en ese momento cambiaban todos los días: el lunes un vagón rondaba los 1 400 rublos, el martes los 1 500, el miércoles 1 700, y el jueves ya los 2 000 rublos . Y los expedidores se vieron obligados a aceptar, puesto que no había suficiente parque móvil para todos.

Algo similar se observó en el ámbito de viajes. El Consejo de Administración de "Sociedad Federal de pasajeros ", S.A. (una estructura subsidiaria de Ferrocarriles de Rusia) decidió que los ingresos deberían crecer un 6,3% anual. La propia empresa realmente creció en 2010 y 2011, pero sólo mediante manipulaciones simples. A menudo, los ciudadanos que viajaron en tren, se quejaban de que con antelación sólo se podía comprar billetes caros. En este caso, se quedaban sin comprar las plazas menos cómodas y por tanto más baratas.

La política llevada a cabo por Ferrocarriles de Rusia obligó al jefe del Servicio Federal, Igor Artemyev, a reconocer que la reforma del sector va en la dirección equivocada. Según él, en lugar de un monopolio único, han aparecido varios, aún más draconianos: en el sector de los contenedores, los frigoríficos y otros tipos de transporte.

Tratando de salvar la situación, el Gobierno de la Federación de Rusia a finales de 2011 decidió retirar los 106 000 vagones de "Vtoraya gruzovaya compañía" ("Compañia de carga segunda") S.A. y alquilarlos directamente a Ferrocarriles de Rusia. La parte retirada acciones comenzó a ser llamada "vagones propios incorporados" (VPI). Su costo operacional se calcula de acuerdo a una lista de precios especial, que en seguida sintieron los expedidores de mercancías. V. Zharinov afirma que en 2012, el precio ha caído desde 2 000 hasta 1 100, e incluso hasta 900 rublos por vagón.

En muy poco tiempo se resolvió la cuestión de la exportación de cargamentos de poco beneficio: madera, grava, grano, etc. "De repente", se encontró que en la industria hay 250 000 vagones sobrantes que no hacen más que estorbar en las vías. Todas estas tendencias no han gustado ni a los operadores privados, ni a Ferrocarriles de Rusia. Los primeros se quejaron de la baja tasa de rendimiento, lo que no permite a invertir, y los segundos, de la falta de competitividad de los VPI, que no permiten transportar metales en lugar de madera, la cual compensa poco.

El resultado de este descontento fue la decisión del gobierno de unificar las tarifas al transporte de mercancías desde noviembre de 2012. El Jefe de la Comisión de transporte Ferroviario de la organización "Opora Rossiyi" ("Apoyo de Rusia") Gleb Kinder predice que en la tercera clase de mercancías, que incluye metales ferrosos y no ferrosos, se dará la mayor disminución de precio, por lo que los VPI serán más competitivos. Este paso se da expresamente en favor de "Ferrocarriles de Rusia", S.A. que conseguirá nuevos exportadores en el sector del acero.

A los grandes operadores privados, que con la unificación de tarifas perderán parte de clientes, se les decidió compensar la pérdida de una forma tradicional: mediante la reducción de la competencia en el sector. Las autoridades decidieron establecer sobre la base de la Asociación sin ánimo de lucro "Consejo de miembros del mercado de servicios de operadores del parque ferroviario" (COPF), una sola entidad autorregulada, sin cuya afiliación no estará permitida la actividad del transporte. Los expertos predicen que la decisión será seguida de un fuerte descenso en el número de operadores y de una influencia cada vez mayor del mercado principal restante. Las últimas palabras del director ejecutivo del COPF, Dmitry Korolev, ya ofrecen devolver los vagones propios incorporados, que afectan a los rendimientos de los comerciantes privados, a la segunda empresa de carga de mercancías.

V. Zharinov está convencido de que la reducción de la competencia en el sector y la renuncia al orden actual dará lugar a precios más altos. Según él, la creación de una organización autorregulada permitirá en un plazo de tiempo muy corto, volver al nivel anterior de 2 000 rublos por vagón. Con ello, la calidad del servicio no mejorará. El empresario afirma que ni los operadores privados ni Ferrocarriles de Rusia funcionan según los intereses de los clientes. En el "mercado" reina el dictado : los primeros obligan a los expedidores a pagar los vagones deteriorados no por su culpa y a responder con rublos por el tiempo excesivo de descarga, los segundos se ven obligados a trabajar con un parque defectuoso.

Ferrocarriles de Rusia en calidad de regulador del mercado está sentada sin hacer nada. Por otra parte, las nuevas iniciativas, que consideran los empresarios, han complicado aún más la situación de los transportistas. El presidente del monopolio Vladimir Yakunin pide a las autoridades que le permitan disponer de vagones de carga vacíos en operadores privados, percibir un pago por el tiempo improductivo de los vagones en las vías, así como coordinar con Ferrocarriles de Rusia las peticiones de los expedidores. Los planes del monopolista también está el rechazo de la planificación continua del transporte y la introducción de una a fecha fija, es decir, con un mes de anterioridad.

El Director Comercial de "Uralasbest" S.A. Yakov Remennik dice que la introducción de un proceso tecnológico de red única derivará en la desinformación de los transportistas, porque nadie puede predecir de antemano la cantidad de vagones que necesita. Además, con la llegada de muchos propietarios han empeorado las condiciones de entrega de vagones, y en este caso la transición a la planificación a fecha fija complicará la vida a los expedidores y a los operadores. Será un gran paso atrás: hemos vuelto a aquello de lo que nos fuimos.

Yakov Remennik cree que Ferrocarriles de Rusia opera en un paradigma completamente no comercial, es decir, proporcionar servicios no como debería ser para el consumidor, sino como es más rentable al monopolio. El empresario insiste en un amplio debate sobre las propuestas de Ferrocarriles de Rusia.

Los expedidores son apoyados por Igor Artemyev, que en las acciones de los altos directivos de "Ferrocarriles de Rusia", S.A. distinguió una política tendente a la destrucción de la competencia en el mercado ferroviario. El Servicio Antimonopolio Estatal cree que el problema radica en el hecho de que las autoridades no tienen la autoridad ni la capacidad para regular las condiciones de la prestación de servicios. La propuesta despoja a Ferrocarriles de Rusia de las funciones reguladoras del mercado y suscita un fuerte rechazo al monopolio. V. Yakunin considera que no se exige ningún control sobre las actividades de la compañía: todo está muy estrictamente reglamentado , a excepción de las actividades de los operadores. A ellos es a quien Ferrocarriles de Rusia propone atar en corto, pasando a hacerse cargo de la gestión del parque ferroviario.

G. Kinder está convencido de que la aplicación de esta propuesta dará lugar al hecho de que el transporte ferroviario esté finalmente disponible para pequeñas y medianas empresas.

Vladimir Terletsky