Por qué la "Golondrina" alemana ha derrotado al "halcón" ruso?

30.11.2010 — Informes analliticos

La empresa "Siemens AG" y "Vías Ferreas Rusas", S.A. van a crear un centro de ingeniería que se encargará de la fabricación de trenes eléctricos para Rusia. En el marco de una empresa común, los constructores alemanes traspasarán a los rusos una parte de las tecnologías. Las autoridades rusas calculan que con el tiempo, en el país se realizará una gran parte de los elementos para el expreso "Halcón". Pero los expertos piensan que sin una modernización de las infraestructuras, todo esto será gastar el dinero para nada. Tal como aclara el corresponsal de "RusBusinessNews", Rusia se ha acercado a la creación de su propio transporte ferroviario de alta velocidad, pero no ha podido llevar el proyecto hasta un final lógico según causas político-económicas.

El memorándum sobre la producción conjunta y el servicio de trenes eléctricos modernos en Rusia fue firmado por "Siemens AG" y Vías Ferreas Rusas en julio de 2010. El centro de ingeniería será una parte de esta empresa conjunta. Entre sus cometidos estará la adaptación de la documentación de tecnología y construcción del tren "Golondrina", que será fabricado en la plataforma Desiro, a las condiciones rusas.

Los primeros 38 componentes cuyo coste es de 410 millones de euros serán elaborados en la fábrica de la empresa "Siemens AG" en Alemania. Las "golondrinas" actuarán en Rusia hasta finales de 2013. En septiembre, las partes firmaron otro contrato para el encargo de 16 trenes eléctricos, una parte de los componentes para los cuales (cerca del 35%) se producirá en Rusia. De la organizacion de produccion de estas "golondrinas" se ocupará la empresa que será creada para la primavera de 2011.

Como confirma el servicio de prensa de "Vías Ferreas Rusas", S.A., actualmente se está trabajando la cuestión con la compañía "Siemens AG" y con los potenciales organizadores de la empresa conjunta, acerca de la compra antes de 2020 de 1200 vagones para trenes suburbanos. El nivel de localización para 2017 debe alcanzar el 80%, es decir, que la práctica totalidad de los trenes se fabricarán en Rusia.

El traspaso de tecnologías de "Siemens AG" a los productores rusos de componentes móviles corredizos ha hecho al primer ministro de le Federación de Rusia Vladimir Putin a la idea de la posibilidad de producir las piezas para el expreso Halcón usando el mismo equipamiento. El mandatario del gobierno supone que la tarea puede ser llevada a cabo media en caso de haber buenos suministradores. Pero con éstos, confirman los empresarios, hay en Rusia un gran problema.

El director comercial de la compañía "Elektroproyekt" Piotr Ivanov dice que la empresa conjunta "Locomotoras de los Urales" tras haber proyectado con la tecnología de "Siemens AG" locomotoras con motores asíncronos está teniendo dificultades en su lista de equipo. Los socios no pueden proponer a la empresa un total complejo de servicios que incluye suministros centralizados de bloques y agregados, logística, consultas y servicio al público. Por eso "Locomotoras de los Urales" tiene que fraccionar los pedidos, que no siempre salen a cuenta.

En palabras de los expertos, en Rusia sólo las empresas únicas poseen tecologías de equipamiento modernas. Son, como norma, empresas sólidas que sacan su producción no sólo al mercado interior, sino también al extranjero. Entre ellas se da ahora una dura selección de suministradores de elementos para las "golondrinas". La dirección no es nueva, por eso P. Ivanov no tiene dudas de que tendrá éxito no sólo realizar el proyecto, sino también garantizar el servicio.

Con los "Halcones" todo es considerablemente difícil. El pequeño y mediano negocio ruso no está preparado para asimilar nuevas tecnologías. A la mayoría de las empresas, incluídas las que llevan fábricas militares, les hace falta tiempo para instruir al personal y para renovar el equipamiento. En Rusia no hay maquinaria, ni gran gran cantidad de materiales modernos, ni fundamentos de base, y ni siquiera hay instrumentos. Los especialistas dicen que si Suecia, Japón, Estados Unidos e Israel suspenden el suministro de intrumental, los rusos no tendrán con qué elaborar el metal.

La creación de centros de ingeniería y la generación de experiencias para la modernización (existiendo finanzas) de la producción puede tardar hasta tres años. Pero la existencia de potencial intelectual no garantiza el éxito: se necesitan miles de millones de rublos para mejorar la calidad de la producción rusa. En un país de materias primas no se dispone de la lámina de aluminio y de cobre requeridas. Como confirma Piotr Ivanov, los transformadores ontados a partir de los elementos rusos a menudo se salen del sistema. Los extranjeros no quieren arriesgarse, y por eso prefieren producir ellos mismos las piezas.

Director de EDO Automatización Nicolás Manko ha confirmado que las empresas extranjeras particularmente no quiere transferir la documentación y la tecnología a los rusos. Tal vez, sugiere, es demasiado pronto. La infraestructura ferroviaria de Rusia no está preparada para el tráfico de alta velocidad. El "Golondrina" alcanzará velocidades de hasta 160 kilómetros por hora, por lo que no ocasionará mucho daño a la economía ferroviaria. Para obtener más velocidad, el "Halcón" bajo cuyas ruedas se rajan los raíles, sería deseable un trazado especial. En virtud de todo esto, en Rusia siguen soñando, y esto significa que el "Halcón" saldrá a las vías existentes a velocidad normal. En consecuencia, los productores no encuentran ningún sentido a su fabricación.

Los colaboradores del Instituto ruso de investigación científica del transporte ferroviario dicen que las compañías extranjeras acuden a la localización de la producción sólo en caso de que haya una demanda estable para su producción y los proveedores estén dispuestos a trabajar según los stándards mundiales. La coincidencia de estas dos condiciones ha obligado a la empresa VOLVO a levantar en Rusia sólo dos empresas para producir tractores. Hitachi de Japón está construyendo cerca de Tver una fábrica de excavadoras. La producción ferroviaria es más complicada y tiene menos demanda, y por eso la ruta de acceso a la localización será más larga y difícil.

El Director General de "INFOLine-Analitika" Mijail Burmistrov considera que la cuestión clave para la ubicación real de la producción es la voluntad política de "Vías férreas de Rusia", S.A. Las compras de productos extranjeros aceleran el atraso y la degradación de las empresas rusas de la ingeniería ferroviaria. Mientras tanto, la tecnología propia del país, ha creado el tren de alta velocidad "Halcón-250," que sólo a causa del ministro de comunicaciones de Rusia, Guennadi Fadeev no ha sido dispuesto para su fabricación en serie.

El "Halcon-250" ha sido desarrollado y probado, durante nueve años. Se suponía que sobre esta base se crearía un tren rápido. Por primera vez, el público vio el "Halcón" en 1999. Entonces comenzaron las pruebas en la Vía de Octubre. Alcanzó en un vía operativa hasta 237 kilómetros por hora. La distancia entre San Petersburgo y Moscú la superó el expreso 4 horas 40 minutos, pasando la mayor parte del trayecto a una velocidad de 200 kilómetros por hora. Después de cinco "paradas" de prueba se reconoció su éxito, que fue confirmado por las firmas de los representantes de los organismos competentes como el Ministerio de comunicaciones y de la Academia Rusa de las Ciencias.

A finales de 2002 el "Halcón" debió comenzar sus recorridos regulares. Sin embargo, aquel año accedió al cargo de responsable del sector ferroviario Guennadi Fadeev, y el asunto concerniente al "Halcón" cambió de repente. Por indicación del ministro se llevaron a cabo pruebas experimentales que revelaron inadecuaciones técnicas para con algunas necesidades de los sistemas, agregados y equipamiento. Todas estas deficiencias, confirma Mijail Burmistrov, pueden eliminarse totalmente. Sin embargo, una comisión del ministerio reconoció inesperadamente que el prototipo de tren de alta velocidad no era apto para el servicio. En 2003, G. Fadeev, dijo que el proyecto "Halcón" era un "error histórico".

A pesar de enérgicas protestas de los líderes de las empresas industriales y organizaciones científicas al más alto nivel, se decidió paralizar por completo cualquier trabajo sobre la creación de componentes nacionaesl para la alta velocidad. Todo el trabajo, incluidas las pruebas piloto, costaron al Estado en 32,5 millones de dólares USA., que es comparable al costo de un tren de serie, fabricado por los líderes mundiales en este campo. De acuerdo con los diseñadores, para poner a punto al "Halcón" hicieron falta alrededor de 3 millones de dólares.

Los expertos dicen que en Rusia, los proyectos pueden fallar por razones políticas y económicas. En lugar de dedicarse a los negocios, los ejecutivos de la industria están más preocupados con la forma de presentarse ante el presidente de Rusia, qué decir en una reunión en el Kremlin y cómo merecer la simpatía de sus superiores. Los que plantean cuestiones incómodas para la próxima reunión no serán convocado. Esto es la política. Pero esto es la economía: las tarifas de energía en Rusia están creciendo, los salarios de los empleados del Estado suben, el mercado de trabajo es variable, y la productividad no está en aumento. Según los fabricantes, la piezas en Rusia se procesan en máquinas con una velocidad media de 2.500 revoluciones por minuto. En Estados unidos la velocidad de procesamiento es de 30.000 a 50.000, o incluso 400.000 rpm. Las máquinas rusas están en una situación de desventaja en velocidad, ¿por qué entonces los trenes nacionales deberían superar a los alemanes y los chinos?

Vladimir Terletskiy