Terroristas hicieron explotar el mercado de muebles en Rusia

05.04.2010 — Informes analliticos

La Asociación de los fabricantes de muebles de los Urales anunció en Ekaterimburgo la apertura del supermercado de muebles con el área de 2 000 metros cuadrados. Pronto habrá nuevas tiendas de muebles de calidad. Tomando la venta de productos en sus manos, los fabricantes esperan reducir los precios de los productos en casi un cuarto. Por medio de aplicar medidas tan simples los fabricantes de muebles procuran de revertir las tendencias negativas en el mercado.

Según los datos de Yulia Reshetnitak, director ejecutivo de la Asociación de los fabricantes de muebles de los Urales, en el segmento de muebles élite la caída de las ventas en el período de la crisis ascendió al 60-70%. Los muebles económicas venden menos en el 12-15%, lo que, por cierto, dio un sablazo al fabricante, que establece en este segmento la prima mínima al costo. Especialmente fueron afectadas las ventas de muebles blandos que disminuyeron en todos los segmentos en el 45-50%.

Lal experta cree que el mercado está afectado por la reducción masiva de personal en las empresas de los Urales y una neurastenia general. Los bancos dejaron de conceder préstamos a las personas físicas, debido a los cuales el mercado vanía creciendo los últimos diez años. Una vez desaparecieron éstas, las ventas cayeron en declive. Incluso la reanudación de los préstamos no puede invertir la tendencia negativa: la demanda de muebles de las clases económica y élite se recupera lentamente, porque las demandas de la gente han disminuido.

La Asociación de las empresas de muebles e industria maderera de Rusia más se inclinan a acusar no a los banqueros, sino a la política de precios conservativa y a la de los mismos fabricantes: el índice de los precios de muebles, a pesar de la crisis, va creciendo al 7-8% al año. Inflexibilidad de los fabricantes de muebles de Rusia ha dado lugar a que en las condiciones de la devaluación del rublo, ellos no sólo oprimieron el mercado de importación, sino cedieron cierta parte de ésta a sus competidores: la proporción de muebles extranjeros en el mercado ruso en 2009 aumentaron en un 3,3%.

Serguey Tribunov, gerente de Ventas de la empresa de "Fábrica de muebles Kvinta", S.R.L., cree que "la culpa" tienen chinos y bielorrusos que fabrican muebles muy baratos. Por ejemplo, en el segmento medio la diferencia entre el armario ruso y bielarruso, tomando en cuenta los derechos arancelarios, es de 20%. Por De acuerdo con el representante de la "Kvinta", esta diferencia se forma debido a bajo coste de los recursoshumanos y forestales en la misma Bielorrusia. Los rusos por lo tanto esperan aumentar sus ventas sólo con el desarrollo del mercado de la construcción.

Viktor Konteev, vice alcalde de Ekaterimburgo no dejó esperanzas a los fabricantes de muebles: según él, la puesta en servicio de la vivienda nueva sigue disminuyendo dos años seguidos. En 2010 su disminución en la capital del Distrito Federal de los Urales será no inferior a 100 mil metros cuadrados. En consecuencia, cree el funcionario, los fabricantes de muebles sus esperanzas de aumentar las ventas deben relacionar con el mercado secundario de vivienda, ampliando la gama de productos y perfeccionando sus métodos de promoción. Según V.Konteev, es necesario llevar a cabo una campaña de publicidad competente y entrar a los mercados extranjeros.

Alexandr Masurski, representante de la fábrica de muebles "Gomeldrev", confirmó la razón del funcionario de Ekaterimburgo: según él, los fabricantes de Belarrusia están presentes en los mercados extranjeros no por los bajos salarios en la industria de muebles, sino debido a la política de promoción de productos. El Gobierno de este país ha dividido los mercados de venta extranjeros en las zonas, y los miembros del gabinete de ministros llevan la responsabilidad personal por una región concreta. Esta práctica, considera A.Masurski, genera un interés personal de los funcionarios en la promoción de productos bielorrusos en los mercados extranjeros.

Yulia Reshetnitak llama la atención al régimen aduanero de Bielorrusia más suave, que permite a los fabricantes comprar en el extranjero no solamente los accesorios, la tela y espuma, sino los detalles frontales de los muebles. Los chinos, afirma la experta, icluso copian los modelos italianos y alemanes y los venden más barato. Ambas opciones no convienen a los uralianos debido a su distancia de las fronteras, la falta de la base de calidad y especialistas calificados. Las encuestas de los compradores muestran que a los clientes no les gusta el diseño de muebles nacionales: los fabricantes fabrican los modelos del mismo tipo. Los intentos de atraer a la industria a los diseñadores de Ekaterimburgo no han cambiado la situación: la originalidad y los precios de elaboraciones de diseño todavía no se ajustan entre uno y otro. En opinión de la experta, el "ajuste" puede tomar, por lo menos, unos 10-15 años.

En los próximos años para los fabricantes de muebles habrá pocos cambios. En 2010, los expertos de la Asociación de las empresas de muebles e industria maderera de Rusia preven que el mercado del muebles caerá más en unos diez por ciento. Desde 2011, poco a poco comienzará a recuperarse, principalmente debido a la demanda reprimida: el abastecimiento de muebles en Rusia aproximadamente 2,5 veces es menor que en los países desarrollados.

Los proveedores de equipos para la industria del muebles esperan que el crecimiento moderado ya se notará este año. Según Yuri Sobin, director general de "KAMI-Ural", S.R.L., las instituciones de arrendamiento financiero y de crédito comenzaron a ofrecer activamente sus programas, lo que se refleja en las ventas de equipos. El experto, sin embargo, se negó a revelar el porcentaje de aumento en comparación con el año 2009, señalando que la empresa llegaría a los índices de 2008 no antes de 2012. Los analistas de Research Techart hacen previsiones aún más prudentes: al nivel de 2008, cuando los muebles fueron vendidos en 160 mil millones de rublos, el mercado volverá no antes del 2014.

Mijail Trofimov, gerente mayor del departamento de carga y ventas al por mayor de "TD Miassmebel", S.R.L., no se compromete ni a predecir cuándo el mercado llegue al volumen de ventas de 2007 o de principios de 2008. En la época de la crisis la empresa de Miass aumentó considerablemente su gama de productos, amenizando los colores, mejorando la calidad de la tapicería, pero estas medidas influyeron poco a la demanda. "No sé cuándo volvamos al nivel anterior a la crisis - subraya M. Trofimov.- Todo dependerá de la situación política y de los precios del petróleo. Los eventos en el país y en el mundo, incluso los atentados de terroristas - afectan mucho a las ventas. Nuestro cliente, que perteneciente a la clase media, se siente la inseguridad del futuro, y por lo tanto prefiere no gastar dinero en el consumo. 

Vladímir Terletski