Rusia ha serrado el mercado del Servicio Publico de electricidad

En la red del sistema energética de Sverdlovsk, opina Yuriy Zajarov, director de la sucursal uraliano de ZAO "La agencia de pronóstico de los balances eléctricos", el consumo máximo en 2009 alcanzará a 6.300 MW, lo que presenta una caída en unos cien mega-vatios frente al desfavorable 1995. Los mayores protagonistas de la caída son los consumidores industriales: OAO RUSAL-BAZ disminuyó su consumo el 30 por ciento, OAO "Planta de aleaciones ferrosas de Serov" - el 16 por ciento. La economía tendrá un largo recorrido para salir de la crisis y llegará a los índices de 1990, el año de pico de consumo eléctrico regional, no antes de 2016, según opinan los expertos.

A pesar de dicha caída en el consumo, suministrar la energía eléctrica a los mayores consumidores sigue siendo el problema. Según las palabras de Artyom Bartenev, director de OAO Gerencia regional del control de sistema eléctrico de la región de Sverdlovsk, este diciembre el nudo eléctrico de Ekaterimburg ha batido el récord de consumo. Las redes en esta zona están funcionando al limite de su capacidad, por lo cual esta previsto construir dos subestaciones. Pero hasta su puesto en servicio en 2011-2012, las empresas energéticas están enfrentando la necesidad de suspender las obras de reparación o poner las restricciones al consumo eléctrico.

En otra zona problemática, Serovo-Bogoslovskiy, la situación está un poco mejor. La crisis ha permitido reconstruir las líneas eléctricas existentes y comenzar la construcción de una línea nueva de 500 kV Severnaya-BAZ, que será puesta en servicio dentro de un año.

No obstante, no se puede modernizar todo el sistema, aprovechando la disminución del consumo. El Director General de OAO FSK EES MES de los Urales, Gennadiy Nikitin señala que debido a la reforma energética, las instalaciones que forman la red nacional eléctrica pertenecen a varios personas jurídicas. Y como no hay un instrumento que regula las relaciones de todas las partes interesadas, el desarrollo y reconstrucción de la red nacional de energía eléctrica se complican.

La capacidad generadora también ha resultado difícil renovar de forma considerable. Según los datos del Ministro de Energía Yuriy Shevelev, los planes para renovar muchas instalaciones están congelados debido al descenso en el consumo eléctrico. Para ser ejecutados los proyectos deban ser rentables, pero eso es un problema.

Vladimir Nechitaylov, Vice-Directór Generál de OOO UGMK Jolding dice que hoy por día es imposible en absoluto interesar a un inversor con construcción de una nueva subestación. A su tiempo, Compañía Minera y Metalúrgica de los Urales comenzó a construir dos bloques de carbón con capacidad de 1.000 MW, pero ahora está prácticamente en un callejón sin salida. Los banqueros creen que es la obligación estatal y no empresarial desarrollar la infraestructura. Según palabras del experto, ninguno organismo de crédito manifestó deseo financiar el proyecto. Pero el Estado ruso no quiere incluso reconstruir las vías férreas para suministrar el combustible a nueva subestación. Ni muestra deseo certificar el equipo importado como una unidad, que supone la reducción considerable de los gastos de aduana. En consecuencia, los proveedores coreanos y franceses negaron participar en el proyecto y vienen los mediadores norteamericanos ofreciendo un equipo chino usado. Por lo que dicen no ellos tienen problemas con certificación.

Vladimir Nechitaylov supone que la situación actual requiere recurrir al mecanismo de la colaboración entre el Estado y el sector privado o incluir los gastos de construcción en las tarifas de electricidad. Georgiy Leontyev, deputado de la Duma Estatal rusa opina que el aumento de las tarifas va enterrar la industria y arruinar la población.

Según opina el experto, la reforma de la industria energética rusa no ha conseguido introducir en la misma las relaciones del mercado: se frustraron las esperanzas de atraer inversiones al sector de generación eléctrica, ni nació la competencia, a grandes rasgos, que llevó a la reducción de los tarifas de electricidad. Por ello el Estado se veo obligado reajustar sus planes anteriores.

En particular, Rusia ha suspendido la ejecución del programa de construcción de los fuentes de energía renovables. Hay varias razones: primero, en la crisis es difícil vender la electricidad producida en estaciones de energía eólica y solar, porque sale más cara, segundo, el gobierno no quiere comprar las tecnologías en el extranjero y Rusia no tiene sus propias. Por ello, las autoridades han serrado temporalmente el mercado del servicio publico aumentando de manera brusca la financiación de las obras de ciencia e investigación y diseño experimental.

Los expertos dicen que no sería fácil reducir la dependencia de Rusia de la maquinaria importada: Rusia no tiene el acero de grano necesario para aplicaciones eléctricas, ni posee una base experimental para el equipo eléctrico etc. Pero la decisión ya ha sido tomada: los funcionarios dicen de manera mesurada que el país alcanzaría para 2020 los 20 GW para el uso de energías renovables.

Simultáneamente empezarán disminuir la capacidad eléctrica industrial de modo obligatorio. A los municipios obligarán usar los tipos del combustible locales: turba, aserrín etc. A las empresas generadoras les obligarán corresponder a los estándares del precio de coste, aplicando las multas en caso de sobrepaso. Las empresas industriales que consuman la electricidad en exceso también serán penalizadas.

El Estado, afirma Georgiy Leontyev, trata llegar a un término medio entre el atractivo de la industria energética para los inversores y el aumento de las tarifas para consumidores. Es posible que el sector energético será regulado "a mano", es decir, pasará bajo el control del Estado.

El gobierno federal ya ha obligado a los gobernadores elaborar las estrategias del desarrollo energético regional. Sin embargo, el problema consiste en que los expertos no se dan una idea cual sería la futura demanda de electricidad. Según palabras del Vice-Director General de OAO Gerencia de control unificada del sistema eléctrico de los Urales, Oleg Gromov, las empresas industriales de la región no tienen previsto aumentar el consumo eléctrico en la perspectiva inmediata.