Los negocios en Rusia han sido condenados a la horca

28.09.2011 — Informes analliticos

La destitución del ministro de finanzas ruso Alexei Kudrin ha causado en la comunidad una discusión sobre el futuro del país. Algunos expertos suponen que Rusia está entrando en un período de inestabilidad económica. Sin embargo, los comerciantes de los Urales comunicaron al correspondiente de "RusBusinessNews" que con A. Kudrin no pudieron desarrollarse con normalidad. Los impuestos y recaudaciones existentes son solo orientados a la economía basada en materias primas y son solo aceptables para unas cuantas decenas de empresas del estado y compañías cercanas al gobierno. Los empresarios dudan de que al país le espere un cambio mientras que en el poder se encuentre la clase política actual.

La destitución de A. Kudrin tuvo lugar en el momento en el que en la duma del estado y en la comunidad continúan discutiéndose las iniciativas del gobierno sobre los impuestos. Ofreciendo a los últimos comprar patente o pasar a un sistema simplificado de tributación en vez de mantener el sistema de impuesto unificado sobre la renta imputada

El iniciador de los cambios ha sido el ministerio de haciendas de Rusia que está tratando de ampliar el alcance de los recaudadores de impuestos. Además en el 2010 las autoridades fiscales decidieron excluir a las tiendas, restaurantes, hoteles, tiendas de reparación de automóviles, lavanderías y clínicas veterinarias del sistema de impuesto único. Se explicaba todo esto como el deseo de hacer el presupuesto de ingresos más predecible.

En realidad el ministerio de hacienda en los últimos años sigue pensando cómo eliminar el déficit del fondo de pensiones de Rusia. Alexei Kudrin sugirió resolver este problema como se hace en la mayoría de los países de Europa; aumentando unos cuantos años la edad de jubilación de los rusos. Pero el gobierno consideró esta recomendación como inaceptable. Los financistas sólo tenían dos opciones: aumentar los impuestos o aumentar el déficit del presupuesto ruso. A. Kudrin ha sido siempre un oponente de los préstamos y por lo tanto prefirió aumentar la carga fiscal sobre el fondo de salarios destinados a fines sociales.

Dichas modificaciones fueron realizadas en la legislación. Los empresarios reaccionaron a esta decisión del gobierno "ocultando" de forma masiva los salarios y en el verano de 2011 el presidente Dmitry Medvedev ordenó reducir el impuesto social desde los 34% a un 30% (para las pequeñas empresas - hasta el 20%). El primer ministro Vladimir Putin admitió a la prensa que él no sabe cómo llenar el vacío que se ha planteado en el presupuesto. Después de muchas dudas el ministerio de hacienda promulgó las "directrices básicas de la política fiscal" en las cuales intentó realizar las disposiciones de las gobierno y mantener los ingresos presupuestarios.

El ministerio ha propuesto reducir las primas de seguros, pero sólo para aquellos empleados cuyo salario no exceda los 512 mil rublos al año. Cualquier salario por encima de esta cantidad se impondrá a un impuesto del 10%. Los empresarios estiman que un negocio de tamaño promedio pagara al Estado más de lo que pagan hoy en día, comenzando con un salario mensual de 60 mil rublos, una pequeña empresa - hasta 80 mil rublos que no es tan raro para los servicios y el comercio. Alexei Kudrin admitió en una rueda de prensa que el aumento golpeará no sólo al sector financiero y los comerciantes sino también a los ingenieros con buenos salarios en las empresas innovadoras.

En la última de sus declaraciones como ministro se hizo evidente que el ministerio de hacienda tratará de sacar de las empresas lo más que pueda. Es por eso que a la duma de estado fue presentado el proyecto en el cual se anulaba el impuesto unificado sobre la renta presunta y que permitía a las municipalidades determinar el valor de la patente por sí mismos. Un mejor regalo para los funcionarios locales no podrían inventar.

Se puede hablar mucho sobre si será el presupuesto ruso más predecible que antes, sin embargo hasta ahora está claro que los negociantes están muy decepcionados con la posición del gobierno. El presidente de la unión regional de sverdlovsk de la pequeña y mediana empresa Anatoly Filippenkov cree que el gobierno no lleva una política consecutiva con respeto a los empresarios. Por un lado el gobierno asigna fondos a los rusos para la organización de su empresa y por otro lado aumenta la carga tributaria y autoriza el incremento de las tarifas de los monopolios naturales.

La falta de deseo del gobierno de crear las condiciones necesarias para los empresarios es lo más deprimente. Ellos entienden que no hay dinero para pagar las pensiones pero el fondo de pensiones no solo se debe llenar por parte de las recaudaciones e impuestos a la pequeña empresa sino también por otras fuentes: por ejemplo mejorar la efectividad de las corporaciones públicas. Numerosos expertos propusieron hacer frente a los obstáculos burocráticos en el registro de nuevas empresas que obviamente no es propicio para aumentar el número de contribuyentes así como la introducción de una escala progresiva para el impuesto sobre la renta. Pero esto son sólo palabras vacías: pelearse con los oligarcas en estos momentos las autoridades rusas actuales no quieren y prefieren sacarle la "leche" a todos los demás.

El diputado de la duma regional de Sverdlovsk Vladimir Gerasimenko afirma que con el aumento de las cotizaciones sociales cerca de un tercio de las pequeñas empresas se ha cambiado a la "ilegalidad". Sin embargo y esto no sirvió de nada y muchas otras empresas han quebrado. El parlamentario cree que en el futuro para los negociantes las cosas se pondrán peor: la abolición del sistema de impuesto unificado hará el sistema de impuestos más horrible. Sin esperar el deterioro de las empresas V. Gerasimenko hoy día ofrece reducir la tasa de tributación para el sistema de tributación simplificado desde un 10% a 6%. Las autoridades de la región de Sverdlovsk estuvieron en desacuerdo y esto obliga al diputado a mirar al futuro sin mucho optimismo.

El empresario Vladimir Novak cree que las reducciones de los impuestos no ayudaran a los negocios en Rusia. La crisis económica mundial observada en estos momentos será más profunda que incluso la gran depresión. Y puesto que Rusia emergió la economía basada en materias primas a un tamaño bastante modesto el país está condenado a fuertes impactos asociados con la caída de la demanda en los países desarrollados. La salvación de las pequeñas empresas puede estar relacionada con el desarrollo de la producción y el consumo dentro de Rusia. Para ello se requiere de una estrategia especial de impuestos que estimule a los productores nacionales. Sin embargo sobre este tema nadie ha escuchado nada en el país. Por otra parte el Banco Central mantiene tasa de cambio excesivamente altas lo que golpea negativamente a la industria.

La importación continúa prosperando, el banco central informa sobre la reducción de la inflación y todo aparentemente se ve bien pero en realidad la economía rusa se está deteriorando. En consecuencia, si se continúa con esta política no tiene ninguna importancia si se mantendrá el impuesto sobre la renta presunta o la patente. Con ausencia de incentivos incluso un recorte de impuestos es igual que una cataplasma para un muerto.

Interviniendo a favor del aumento de los impuestos el ministro Alexei Kudrin ha luchado por reducir el déficit presupuestario. Sin embargo el fue despedido no por esa razón sino por el deseo de no financiar el complejo de defensa. Para los expertos hay poca diferencia entre la posición del ex ministro de hacienda y sus oponentes: los unos y los otros están preocupados sobre la forma "correcta" de gastar el dinero presupuestario pero prácticamente nadie ha hecho nada para mejorar la eficiencia de la economía. De dicha ineficacia la clase dominante ha aprendido a obtener ganancias y por lo tanto el destino de los productores no les importa.

Dicho enfoque está condenado a la destrucción de los negocios. "No tengo ninguna duda de que el mañana será peor - asegura el empresario Dmitry Golovin. "Si yo soy condenado a la horca seré colgado."- dijo él. Vladimir Gerasimenko cree que el próximo cambio de Dmitry Medvedev por Vladimir Putin como presidente de Rusia sólo empeorara la situación. Esta reorganización es una señal directa para cerrar sus negocios y salir de Rusia.

Vladimir Terletsky