El carro de la industria rusa ha perdido el caballo

28.03.2011 — Informes analliticos

La construcción de maquinaria en Rusia ha caído a la época del desarrollo industrial, característico de los 30-s del siglo 20. La ausencia del número necesario de empresas de alta tecnología conduce a la degradación de la educación superior técnica, que también fue destruida por las reformas irrefelexivas. Según los expertos, incluso miles de millones de dólares de inversión en capacidad de no dan el efecto adecuado: la modernización es el principio necesario de la gestión, y sólo entonces se da la reorganización. Sin embargo, como aclaró el corresponsal de "RusBusinessNews" a gestionar la producción en Rusia no enseña nadie, y hay pocos que quieran aprender técnicas de gestión.

Hace dos años, el presidente ruso, Dmitri Medvedev, esbozó un plan para mejorar la industria del país. Pero hasta ahora Rusia no ha decidido sobre lo que realmente hay detrás de este término. En el VII foro eurasiático de ingeniería celebrado a finales de marzo de 2011 en Ekaterinburgo, a la modernización de la maquinaria se dedicó una mesa redonda especial. Sus participantes no están de acuerdo sobre la forma de desarrollar la industria.

El director de "Unión de empresas de construcción de maquinaria de la región Sverdlovskaya" Andrei Buhmastov cree que después de dos años en el país, no ha sido elaborado un modelo para el desarrollo de ingeniería mecánica. En primer lugar, todos se apresuraron a construir parques industriales, y luego se habló de centros tecnológicos especializados. En relación a esto "olvidaron" aclarar la ley que se encuentra trás estos términos.

El vicejefe de construcción de "OKB Novator", S.A. Boris Golementsev, por el contrario, cree que la terminología es clara, lo que no se entiende es otra cosa: ¿por qué la modernización se ha iniciado en el lado equivocado? El problema básico de las empresas de construcción de maquinaria, argumenta, no es la falta de dinero y ni siquiera la maquinaria obsoleta, sino la pésima gestión de la producción. Es decir, la mala gestión impide que los industriales de Rusia puedan entrar en el mercado con productos populares y hacerse un hueco en él. Con casi el mismo coste del metal y de la mano de obra las empresas rusas pierden frente a las fábricas europeas y americanas, porque no prestan suficiente atención a la eficiencia de producción.

Los gerentes de rusos, dice B. Golementsev no están acostumbrados a "meter" los costos en el marco del precio actual del mercado mundial del producto. Para encontrar su lugar en el mercado, es necesario modernizar el sistema de planificación de la producción y del control, la remuneración y sólo después de ello el rearme técnico. Con un buen sistema de gestión se puede trabajar durante un tiempo con equipamiento deficiente, pero el esquema tradicional de Rusia del "carro delante del caballo" sólo desacredita la noción misma de la modernización: la técnica del equipo adquirido, se detendrá si la empresa carce de gestión.

Los fabricantes afirman que los fondos para la actualización del equipo de la maquinaria de hoy se pueden encontrar: además del crédito bancario, hay otras posibilidades. Según el director del Departamento de Desarrollo del complejo "Pumori-SIZ" Dmitry Krasnoselskiy, las empresas pueden obtener del Estado una subvención irrevocable de 300 millones de rublos. La corporación estatal "Rosnano" está lista en un 49% para financiar el proyecto, aprobado por los expertos, y el registro de empresas en zonas francas como Skolkovo les permiten comprar equipos importados con un 75% de descuento (ésta es exactamente la cifra de su encarecimiento al cruzar la frontera rusa).

Por ello, dicen los expertos, todas las conversaciones acerca del envejecimiento del equipamiento, las carga el diablo. El problema es otro. Según Andrei Buhmastov, el desarrollo de la ingeniería de hoy, obstaculizados por una formación inadecuada. Es posible comprar centros de mecanizado, lo que reduce los costos, y nadie deberá encargarse de ellos.

No se puede decir que no se conceda importancia a la formación del personal técnico. Por ejemplo, "Pumori-SIZ" creó centros de formación y demostración en Ekaterinburgo, Perm, San Petersburgo, Kazán y Rostov. En general, sin embargo, la situación es desoladora: en primer lugar, la creación de nuevos centros de formación se ve muy difícil debido a la destrucción en los años 90 del siglo pasado, de instituciones educativas y de investigación, y en segundo lugar, todo se hace exclusivamente a la manera rusa, que no es la óptima desde el punto de vista económico y organizativo.

Un ejemplo característico es la creación de centros de formación en la región Sverdlovskaya. Para su organización el gobierno regional ha destinado 100 millones de rublos. Según los expertos, sería lógico que se establecieran centros de mecanizado comprados por las fábricas para a los estudiantes en el turno de día, y en los siguientes para la producción industrial, costeándose, así la maquinaria. Pero, sobre la base de las restricciones legislativas, los centros establecidos en las instituciones educativas están ociosos y mal mantenidos, ya que las míseras tasas presupuestarias del Ministerio de Educación no pueden encontrar personal cualificado. Como resultado, en lugar de suministros industriales profesonalesse consiguen dolores de cabeza: con cada fallo de los equipos tienen que enviar a personal de mantenimiento de las instituciones educativas.

La situación con el personal se ha agravado con el inicio de la reforma educativa en la primera década del siglo. Los ingenieros mecánicos argumentan que la transformación del sistema llevó a que las universidades a la vanguardia no pusieran el producto final, o sea, los graduados, y el flujo de efectivo que se recibe durante la formación de los estudiantes. Los intereses de las empresas industriales en el proceso educativo no están incluidos. A los estudiantes les meten los conceptos básicos de la macroeconomía, mientras los trabajadores de producción necesitan especialistas que sepan cómo manejar los talleres, la zona de producción o la maquinaria.

En este caso, la mayoría de los jóvenes rusos sueñan con ser funcionarios y no ingenieros. El Director del Instituto de Economía y Administración de la Universidad Pedagógica Estatal Profesional Alexander Mokronosov sostiene que entre los graduados no hay más de un 7% de auténticos especialistas, para el resto no es necesario el conocimiento, sino simplemente un documento de educación superior. Si la situación va a evolucionar en la misma dirección, las empresas de alta tecnología en un futuro próximo se quedarán sin gerentes de producción y tecnólogos.

Vladimir Terletskiy